A propósito del litigio generado
por la reclamación de supuesta soberanía de Nicaragua sobre el archipiélago de
San Andrés y Providencia, Colombia conformó un excelente equipo defensor de sus
derechos, encabezado por los expertos en tratados internacionales Julio Paredes
y Marcelo Kohen, que con argumentos sólidos y basados en los antecedentes de
este viejo pleito han rebatido con altura y precisión las pretensiones de la
nación centroamericana ante la Corte Internacional de Justicia.
Recordemos que la soberanía de
Colombia sobre el archipiélago es histórica, pues desde 1803 nuestra nación tiene
posesión legal sobre las islas en disputa. En Junio 23 de 1822 por voluntad libre y espontánea, los
habitantes del Archipiélago de San Andrés
y Providencia, se adhieren a la Constitución de Cúcuta de 1821. En 1903
Nicaragua comenzó a reclamar sus supuestos derechos y en Marzo de 1928 el
conflicto se resolvió a favor de nuestro país con la firma del tratado Bárcenas
– Esguerra. Pero el señor Ortega para tapar su pésima labor como Presidente
tendió una espesa cortina de humo negro, presentando una nueva reclamación de soberanía
sobre las islas, islotes y cayos ante la C.I.J, bajo la premisa de que sus
límites marinos fueron violados con el tratado de 1928
Sobre los resultados de las
argumentaciones de Colombia ante la C.I.J. se abre un manto de duda, creado por
las imprudentes declaraciones de la linda Ministra de Relaciones Exteriores,
María Ángela Holguín quien manifestó textualmente: "Quiero decir que
tenemos que tener en la mente que cualquier cosa puede pasar en esas
posiciones salomónicas que ha tenido la Corte"… "Yo no puedo
decir al ciento por ciento que todo va a seguir igual. No, porque
finalmente estamos en un proceso ante la Corte, y ésta va a tomar unas
decisiones"
Esta es una muestra más del
desconocimiento que tiene sobre algunos temas pertinentes a su alto cargo. Es
una declaración estúpida de la hermosa Ministra, que seguramente ignora que
nuestro país no solo perdería la posesión sobre los territorios que la C.I.J. podría
entregar a los nicaragüenses, según el entender de esta lindura, sino sobre la
plataforma marina circundante con todas sus riquezas, incluyendo los
yacimientos petrolíferos allí existentes.
Claro, que aún es más grave el silencio cómplice del Presidente viajero que no ha
dicho ni “miau” ante la declaración de su funcionaria estrella… ¡por lo hermosa,
obvio!.
Solo nos resta esperar confiados
que la gestión de nuestros defensores ante la Corte Internacional tenga un
feliz término. Crucemos los dedos!!