Desde inicios de Diciembre
de 2011 el gobierno nacional venía soltando, de a poco, declaraciones de una
probable negociación con la narco guerrilla de las Farc con frases como: “… el gobierno tiene la mano tendida para un
proceso de paz” o “… el gobierno
tiene la llave para abrir un diálogo de paz”. En mayo de este año ya las
intenciones del Sr Santos de develaron con mayor claridad al hacer que el
Congreso, engañado por una jugada maestra del pokerman, aprobara el Marco
Jurídico para la Paz donde se crea un monumento a la impunidad total, si la
guerrilla se sienta a negociar un posible acuerdo de paz.
Pero será en esta semana, seguramente antes
del 31 de Agosto, que el Sr. Santos Calderón anunciará al país la instalación
de una mesa de negociación con las Farc en Oslo (Noruega) para el día 5 de
Octubre de 2012, conformada por 10 negociadores (5 por bando).
La historia de este asunto
comenzó en la reunión de Santa Marta, cuando Santos normalizó las relaciones de
Colombia y Venezuela, pidiendo al Sr. Chavez que le colaborara para establecer
contactos con la guerrilla narco terrorista con el fin de llegar a un futuro
acuerdo de paz. Partiendo de allí y con los buenos oficios de Castro y Chavez
se iniciaron los contactos en La Habana con la participación del alto
Comisionado de Seguridad nacional Alejandro Eder por parte del gobierno y de
Rodrigo Granda por las Farc, teniendo
como testigo a un alto representante del gobierno Noruego. Más recientemente
se integraron a estos diálogos, por parte del gobierno el Sr. Enrique Santos
Calderon y algunos generales, y de Mauricio Jaramillo por las Farc.
La mesa de diálogos se
instalará en Oslo y las negociaciones finales se llevarán a cabo en la Habana. El cuadro de negociadores del Gobierno será encabezado por el Sr Cesar
Gaviria T, bajo la coordinación del Sr Gabriel Silva y la participación de Sergio Jaramillo (el
mindefensa a la sombra), Frank Pearl como alto Comisionado de Paz y otros aún
no elegidos. Por la narcoguerrilla el equipo de negociación estaría encabezado
por Mauricio Jaramillo, alias El Médico que se ha ganado un puesto en el
gobierno guerrillero y es el actual comandante del Bloque Oriental; Jesús
Emilio Carvajalino, alias Andrés París y Rodrigo Granda quien alcanzó
notoriedad cuando fue capturado por el gobierno de Uribe Velez en Venezuela y
después dejado en libertad para que sirviera de intermediario en futuros
diálogos.
Como garantes o veedores de esta mesa estarán
Chile que entrará a partir de las reuniones en Oslo, Venezuela y Cuba, los
nuevos buenos amigos de Colombia y eternos acompañantes del proceso.
Hasta aquí todo pinta bien
para el secreto diálogo, pero se plantean varios problemas: El primero tiene
que ver con el mesiánico Iván Márquez que se muestra un poco renuente todavía y
el Sr. Timochenko el jefe de papel quien también quiere un poco más de pantalla
en el proceso. Aparentemente ambos serán representados por El Médico quien sería
su vocero. El segundo inconveniente tiene que ver con Fabián Ramirez comandante
del Bloque Sur quien recientemente manifestó al periodista C. Penjo: “… ¡Claro que queremos acabar con la guerra,
pero debe ser bajo un acuerdo sin odios, justo y ambas partes cediendo algo. No
es dejando las armas porque sí o cesando nuestros ataques… No… Es acabando con
las causas de la guerra!” Aclaró además que él no tiene información sobre
estos diálogos. Otro problema es Carlos Catatúmbo el Comandante del Bloque Sur
Occidental (Cauca, Nariño y Huila) que
es el responsable de la guerra que se adelanta en esta región y que no está
dispuesto a dejar el narcotráfico, la verdadera razón de ser de las Farc. Otro
grave problema se plantea por parte de las Bacrim socias de la Farc en el
criminal negocio de la droga, pues se verían afectadas por el posible acuerdo.
Mi Sangre, el nuevo jefe de las bandas criminales no está dispuesto a
permitir que esta situación prospere y
entraría a ocupar el espacio que dejaría el 70% de la guerrilla inmovilizada,
reforzando su alianza con los bloques disidentes. Finalmente, el ELN no está
invitado a estas negociaciones por tanto ellos seguirán con sus acciones
delictivas, en espera de que en un futuro incierto sean llamados a diálogos
Hay que decir que los
Comandantes de las fuerzas militares y de Policía están bien enterados del
asunto y aún cuando algunos no están de acuerdo lo aceptan a regañadientes. La
pregunta es: ¿Qué harán con las Fuerzas Militares y la Policía Nacional durante
estas negociaciones?... ¿Se replegarán y las someterán a un vergonzoso
acuartelamiento?... ¿Seguirán con las actividades consagradas y definidas en la
constitución nacional?...
Bueno, miremos bien la
cuestión. Es obvio que todos los colombianos queremos la paz… eso no admite
discusión! Lo que molesta es la forma, la manera como el asunto se ha llevado a espaldas del
país y particularmente porque faltando 20 mese para las elecciones
presidenciales el Sr Santos nos soltará el nada bien guardado secreto.
Indudablemente es una estrategia política con claros fines reeleccionista, que
de no resultar lo dejaran a él bien parado y en fuera de lugar a las Farc a
quienes se le achacarán, en últimas, el fracaso de las negociaciones. Como buen jugador Santos gana porque si o
porque no.
En el fondo del alma deseo
que la paz se dé. Seguro que sí!... Pero
esto no avalará la gestión del Presidente Camaleón quien ha fracasado en los
demás frentes que son también prioritarios, como la salud, la educación, la
falta de viviendas, el desempleo, la corrupción, la infraestructura vial, la
bomba pensional, el problema carcelario, la ruina del campo, la caída de la
industria y el comercio, y la inseguridad en las grandes ciudades.
¡Que nuestro buen Dios nos vea con ojos de misericordia y nos tienda su mano!
Jayne El Villatero